Los 10 imprescindibles de Sant Jaume
1 - Una de las experiencias más gratificantes es madrugar para contemplar la salida del sol desde la playa de Migjorn. Espectáculo asegurado.
2 - La bicicleta es el aliado perfecto para hacer la vía verde hasta la desembocadura. Son 14 kilómetros de paseo que tiene como final la gola de Migjorn y la isla de Buda. Una ruta llena de paisajes sorprendentes.
3 - El arroz es el ingrediente imprescindible de la cocina deltaica. ¿Quién se puede resistir a una buena paella o un arroz con pato degustado en el corazón del Delta? Tenéis que probarlo.
4 - Con la llegada de la primavera el delta queda completamente inundado, se abren las compuertas y el agua llena los arrozales. Todo está listo para la siembra. Venid a ver cómo el delta se convierte en un inmenso espejo
5 - La sensación de bañarse en las playas casi desiertas del Migjorn, el Serrallo y el Platjola es impagable, ¿os apuntáis?
6 - Durante todo el año, y en especial en primavera y en otoño, en el Delta del Ebro hay miles de aves. Uno de los mejores puntos de observación es el mirador de Migjorn, donde podréis maravillaros con este espectáculo único.
7 - ¿Os imagináis pisar el barro del arrozal? Oler del arroz? ¿Contemplar de cerca la espiga madura? Ahora es posible experimentar estas sensaciones entrando en el arrozal interactivo de Sant Jaume. En el paseo fluvial.
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9 - Hay dos momentos cruciales en la vida del Delta del Ebro, la primavera, época en la que se siembra la arroz y el otoño, cuando se siega. Si deseáis revivir cómo eran los trabajos tradicionales del campo, tenéis que participar en las fiestas de la Plantada y de la Sega.
