Observación de aves en el Delta del Ebro
El Delta del Ebro es una zona húmeda de interés internacional en cuanto a la observación de aves, ya que es área de reposo y de invernada, además de ser lugar de cría de numerosas especies.
Aves durante todo el año
El Delta es un espectáculo ornitológico durante todo el año, pero el tipo de aves y la cantidad varían según la época.
El verano y el final de la primavera es el momento más óptimo, cuando las diferentes especies han criado y el Delta está lleno de vida. En los canales y acequias no es difícil ver familias enteras de anátidas «aprendiendo a nadar».
En otoño, cuando tienen lugar las grandes migraciones, el Delta se convierte en parada imprescindible y lugar de paso para una gran cantidad de aves. El espectáculo está asegurado.
El invierno es la estación de las aves acuáticas, una oportunidad única de disfrutar de la visión de las garzas, las fochas y los patos.
Ruta ornitológica desde Sant Jaume
Desde Sant Jaume d’Enveja iremos a ver aves a la isla de Buda y en la Gola de Migjorn, donde hay una torre de observación que ofrece vistas insuperables de la isla de Buda, con sus arrozales, saladares, charcas y lagunas, además de los cañaverales y de la zona pantanosa de la Alfacada.
Esta área es una de las mejores de todo el Delta para ver una gran diversidad de aves en poco tiempo.
La playa también es un escenario magnífico donde podemos observar aves marinas. Por el camino, grandes extensiones de arrozales nos regalan la visión de cientos de aves buscando alimento o simplemente tomando el sol.
La ruta por el sur del Ebro continúa por la laguna de la Encanyissada, un paraíso ornitológico, y enlaza con la laguna de la Tancada para llegar finalmente a la playa del Trabucador y las Salinas, donde se encuentra la colonia más numerosa de flamencos .